Gastrosana
Alcachofa, Aloe, Tocosh, Chiorella, Fructuosa, Maltitol, Platano, Maltodextrina, Zinc,
Vitaminas B1,B2,B6 y D3


Protector Gastrico Regulador Gastrointestinal
Los alimentos que tomamos diariamente son transformados en nutrientes por nuestro aparato digestivo. De esta forma, pueden ser absorbidos por la pared intestinal y acceder a la circulación sanguínea, donde serán distribuidos a las células y tejidos del organismo. Es en la primera parte del intestino delgado donde tiene lugar, mayoritariamente, la absorción de estos nutrientes: los hidratos de carbono son absorbidos después de ser descompuestos en glucosa, galactosa y fructosa; las grasas se escinden en ácidos grasos y glicerol, las proteínas se descomponen en aminoácidos, etc. Al llegar al colon se produce una absorción de agua y electrolitos y, posteriormente, una acumulación de las materias fecales. Las contracciones del colon que se originan poco después de haber ingerido alimento son las que hacen posible el mezclado y la propulsión de los alimentos.
El tránsito de todos estos elementos a través del intestino depende, a su vez, de un adecuado equilibrio entre la captación y secreción intestinal de agua y electrolitos. Asimismo, el aparato digestivo está íntimamente relacionado con otros sistemas (circulatorio, nervioso central, nervioso vegetativo, hormonal), que contribuyen al funcionamiento óptimo y a su regulación. A la gran cantidad de factores fisiológicos o patológicos que pueden afectar a la motilidad intestinal, deben añadirse factores ambientales, que dependen del entorno de cada individuo. Entre ellos, por su importancia, cabe destacar la dieta y el sedentarismo.
Cualquier alteración que influya inhibiendo o estimulando la motilidad intestinal o alterando el tiempo de tránsito por el intestino contribuye a la aparición de diversas disfunciones intestinales. A continuación vamos a exponer unas de las más frecuentes, que son las diarreas y el estreñimiento.